Las vacunas previenen enfermedades y en esta temporada de invierno es fundamental vacunarse contra varias enfermedades respiratorias
Una vacuna es un producto biológico diseñado para estimular el sistema inmunológico y proporcionar inmunidad contra una enfermedad específica.
De acuerdo con la Organización Mundial de la salud (OMS), las vacunas consisten principalmente en agentes infecciosos, proteínas o toxoides asociados con patógenos atenuados o inactivados.
Aquí hay un resumen de cómo se fabrican las vacunas y cómo ayudan a su cuerpo.
Identificando el patógeno:
Se identifica y aísla el patógeno que causa la enfermedad. Podría ser un virus, una bacteria u otro microorganismo.
Inactivación o atenuación:
En el caso de los virus, estos pueden debilitarse (atenuarse) o inactivarse. Para las bacterias se suelen utilizar formas inactivadas o partes específicas del microorganismo, como proteínas o toxoides.
Los patógenos atenuados o inactivados se cultivan en células o tejidos en el laboratorio y se producen en grandes cantidades.
Los ingredientes activos del patógeno se purifican para eliminar sustancias innecesarias, garantizando la seguridad y eficacia de la vacuna.
Los ingredientes purificados se combinan con adyuvantes y estabilizadores para aumentar la eficacia de la vacuna y prolongar la vida útil.
Pruebas y control de calidad:
Las vacunas se someten a pruebas rigurosas para garantizar la seguridad, eficacia y pureza. Esto incluye estudios en animales y estudios clínicos en humanos. Mecanismo de acción y beneficios de la vacuna:
Estimulación del sistema inmunológico:
Cuando se administra una vacuna, el sistema inmunológico reconoce los componentes del patógeno (o sus productos) como extraños y desencadena una respuesta inmune. Producción de anticuerpos:
Se forman anticuerpos específicos contra el patógeno. Estos anticuerpos circulan por el cuerpo, listos para atacar y neutralizar un patógeno si una persona entra en contacto con él en el futuro.
Las vacunas también estimulan la memoria inmunológica. Esto significa que el sistema inmunológico «recuerda» cómo combatir los patógenos y puede responder rápidamente si la persona se expone a la enfermedad en el futuro.
La prevención de enfermedades:
Las vacunas ayudan a prevenir la propagación de enfermedades infecciosas y protegen a las poblaciones, especialmente a las de mayor riesgo, al proporcionar inmunidad sin causar enfermedades reales.
En algunos casos, las vacunas han ayudado a erradicar o suprimir significativamente enfermedades como la viruela y la polio. Las vacunas son importantes herramientas de salud pública porque previenen enfermedades y reducen la propagación de agentes infecciosos.
Es importante seguir las pautas de vacunación recomendadas por expertos médicos para proteger tanto a las personas como a la comunidad en general.