Para prevenir mayores contagios y muertes por este virus, los gobiernos de los diferentes países implementaron diversas medidas como lo fueron el uso del cubrebocas, toma de temperatura y medidas sanitizantes, restricciones de viajes, cuarentenas, confinamientos, aislamiento social, cancelación de eventos, y prohibición de actividades no esenciales, situación que tuvo un fuerte impacto socioeconómico.