Jeff Bezos y Lauren Sánchez dieron inicio a su boda de tres días, considerada la costosa y más glamurosa del año, en un despliegue de lujo, celebridades y controversia.
Los festejos iniciaron el 22 de junio con una exclusiva foam party a bordo del superyate de Bezos, Koru, frente a la costa croata.
El 26, la pareja viajó en lancha hasta el Aman Venice, donde se llevó a cabo la elegante Welcome Party en un claustro junto a la iglesia Madonna dell’Orto, con un escenario íntimo y decoración artesanal.
Lauren deslumbró con un vestido dorado de Schiaparelli, mientras Bezos optó por un clásico traje negro . La noche congregó a figuras como Kim, Khloé y Kris Jenner, Orlando Bloom, Tom Brady, Oprah Winfrey, Gayle King, Kendall y Kylie Jenner, Leonardo DiCaprio, entre otros.
Ceremonia de ensueño
La boda oficial está prevista para el 27 de junio en la basílica de San Giorgio Maggiore, seguida de la recepción en el histórico Arsenale, lugar elegido tras protestas y retirada de un edificio central por temas de sostenibilidad urbana.
El evento, estimado entre 40 y 56 millones de euros (aproximadamente 46‑76 millones de dólares), ha generado el arribo de más de 90 jets privados, 200 invitados y un despliegue de seguridad sin precedentes. Asimismo, las autoridades locales confirmaron una donación de 2 millones de euros para investigación ecológica de la laguna.
La planeación corre a cargo de Lanza & Baucina, firma británica especializada en bodas de ultra lujo, con locaciones dignas de portada en Vogue y Harper’s Bazaar. Invitados de la realeza y celebridades como Queen Rania, Ivanka Trump y Bill Gates se suman al selecto encuentro.