¿Cuándo es mejor bañarte?, ¿en la mañana o en la noche?

¿Cuándo es mejor bañarte?, ¿en la mañana o en la noche?. Este dilema cotidiano tiene más ciencia detrás de lo que parece.

Más allá de las rutinas personales, existen argumentos microbiológicos que podrían hacerte reconsiderar tu horario de baño.

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Ambas opciones tienen beneficios, pero también riesgos si no se cuida la higiene completa, es decir, no solo del cuerpo, sino también de lo que lo rodea.

¿Por qué bañarte por la mañana puede ser mejor?

Al despertar, tu piel ha acumulado sudor, células muertas y bacterias que prosperan durante la noche. Una ducha matutina te ayuda a eliminarlas, dejándote más fresco y con menos probabilidades de que tu cuerpo huela mal durante el día. Además, el baño puede ayudarte a despejarte y empezar con energía.

¿Y si prefieres la ducha nocturna?

También es válida. Bañarte antes de dormir elimina la suciedad, el sudor y hasta los alérgenos del ambiente que recogiste en la calle o el trabajo.

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Así evitas que estos contaminantes se queden en tu cama. Pero ojo: aunque te bañes de noche, seguirás sudando al dormir y soltando células muertas que alimentan a los ácaros del polvo, responsables de muchas alergias.

Entonces, ¿cuál es la mejor hora para bañarse?

Todo depende de tus hábitos. Sin embargo, sí insiste en un punto clave: la higiene no termina en la regadera. Hay que lavar con frecuencia las sábanas, fundas de almohadas y pijamas. De nada sirve una buena ducha si te acuestas en una cama llena de bacterias y polvo acumulado.

Elige el momento que más se adapte a tu estilo de vida, pero no descuides la limpieza de tu entorno. Una buena higiene no es solo una ducha al día, también es cuidar todo lo que entra en contacto con tu piel.