“Comencé con el triatlón debido a una lesión fuerte en el talón de Aquiles, esto por correr mucho, lo que me dejó fuera casi ocho meses. En el triatlón encontré la importancia de distribuir las cargas de entrenamiento, ya que al practicar la natación, la bici y correr, puedes alternarlos y con esto, aunque no descanses durante la semana, los músculos se recuperan muy bien”.