Desde que era niña, Yadira tuvo el karate en su vida, inspirado por su padre, Héctor Suárez Ontiveros, un respetado sensei en Chihuahua. Desde los cinco años, entrenaba con disciplina en el dojo de su padre, compartiendo el espacio con alumnos destacados, como el actor Omar Chaparro. A los 15 años, ya competía en su primer mundial de karate, donde obtuvo una medalla de bronce.