Si te pasa que desayunas y, apenas dos horas después, ya estás pensando en tu siguiente comida, probablemente lo que estás eligiendo no te está brindando la saciedad que tu cuerpo necesita. Existen alimentos que te darán saciedad y evitarás comer de más, ayudándote a controlar el apetito sin sentir privación ni culpa.
Los alimentos ricos en proteína, como huevos, yogur griego, pollo o legumbres, son esenciales para mantenerte lleno por más tiempo. La proteína estimula hormonas relacionadas con la sensación de plenitud y reduce los antojos entre comidas, según nutricionistas citados por Medical News Today. Incluir una fuente de proteína en el desayuno o la comida es clave para evitar los altibajos de energía.
La fibra también es un aliado. Frutas como manzana y pera, verduras, avena, quinoa o legumbres aportan volumen y ralentizan la digestión, manteniendo el hambre bajo control. Además, los alimentos con alta cantidad de agua y bajo contenido calórico, como sopas, caldos o ensaladas, pueden aumentar la sensación de llenura sin sumar demasiadas calorías.
Por último, las grasas saludables del aguacate, las almendras y las semillas ayudan a prolongar la saciedad cuando se combinan con proteína y fibra. Eso sí, deben consumirse con moderación.
La clave está en elegir alimentos naturales, ricos en nutrientes y que mantengan estable tu energía durante el día. Así, no solo comerás mejor: también te sentirás en equilibrio con tu cuerpo.