“Un corte en un dedo con un folio. Sí, como lo lees”, relató otro médico, al que una profesional respondió: “Pues a mí me llegó un supuesto corte en el dedo con un clip”.
Otra médica compartió: “Una mujer de 30 años vino a las 4 am pidiendo que le operáramos los muslos porque se rozaban y le molestaba mucho”.
“Un paciente se quejaba de que sus flatulencias olían muy mal.Decía que eso no era normal”, contó otra profesional sanitaria.
Otro médico recordó a un señor que llegó a las 3 de la mañana con agujetas por haber jugado todo el día con los niños en la piscina.
Las drogas nunca ayudan, como en este caso: “A las 5 am, la enfermera de triaje salió preguntando cómo ‘catalogar’ a una pareja que decía que habían salido cucarachas por la tubería de desagüe de su casa y se las habían comido.Según las analíticas, estaban muy drogados”.
Otra doctora contó que una chica de unos 20 años se había puesto cera caliente para depilarse sus partes íntimas y, al tirar, le dolió mucho, así que dejó la cera ahí.Venía para ver si se la quitaba yo. Médico y esteticista 2×1″, bromeó la doctora.
Desinformación
La desinformación en internet también es un problema:
“Un paciente llegó con un grano en la nariz, preocupado porque había oído que era en el ‘triángulo de la muerte’.
Pero lo más surrealista fue un tipo con ladillas que las había metido en un bote. Para bote el que di yo…”, comentó una profesional sanitaria con asco.
Las consultas por motivos sexuales son un clásico. “Mi madre siempre cuenta dos anécdotas: una pareja que, al no tener preservativo a mano, usó una bolsa y ambos tenían irritación severa.