Imagina una secundaria donde, además de matemáticas y ciencias, tu hijo pueda sumergirse en el mundo del arte, la música y la danza. Estas escuelas no solo se preocupan por ofrecer un excelente currículum académico, sino que también proporcionan espacios dedicados a la creatividad y la autoexpresión. Desde clases de teatro hasta talleres de pintura, ¡hay algo para cada joven artista !