La frontera entre la historia y la literatura

Edgardo Moreno Pérez se erige como una figura multifacética en Querétaro, una personalidad cuyo legado se extiende a través de distintos campos del conocimiento y la literatura. Con una rica trayectoria en psicología, antropología e historia, ha forjado un camino marcado por la docencia, el análisis de las relaciones internacionales empresariales y la prolífica producción literaria.

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Edgardo es el prologuista del libro Bazar de Sueños, del taller de literatura impartido por Emilio Castelazo en la emblemática Casa del Faldón, en Querétaro. Motivo por el cual forma parte de estas charlas literarias, en las que se destaca su andar por la vida, su conocimiento y su relación con la literatura en Querétaro. 

‘Emilio me platicó de su proyecto de escritura y me llene de entusiasmo, en estos proyectos concretos, que son los bazares, que han derivado a las odiseas… pues quién no se siente Ulises para andar por estos mares y taparse los oídos por los cantos de la sirena’, señaló. Es por esta razón que Edgardo se siente identificado con los proyectos y abre las páginas de su libro de vida para compartirlo. 

Su compromiso con la educación se ha manifestado a lo largo de su vida, impartiendo conocimientos en diversas disciplinas y guiando a generaciones de estudiantes en su desarrollo académico. Su incursión en la dirección de relaciones internacionales en empresas ha sido un puente entre la academia y el mundo empresarial, fusionando la teoría con la práctica y llevando sus habilidades a un ámbito aplicado.

‘Cuando uno lee lo que sale de los talleres, y las personas que están, dicen que no habían escrito nada en su vida, ni se habían atrevido, uno piensa ‘no es posible’ tienen mucha claridad. Otra belleza dentro de los talleres es como cuando uno entra a los bazares, y encuentra paisajes, humaredas, neblinas, o bosques, playas, patios solariegos. Entonces es realmente un bazar pero un bazar de experiencias, que la gente comparte generosamente’, argumentó sobre los ejercicios literarios de los que ha formado parte. 

Moreno Pérez se destaca como un escritor prolífico, con una impresionante cantidad de más de 30 libros en colaboración con otros investigadores. Su labor literaria no solo ha sido un medio de expresión personal, sino también una herramienta para profundizar en la comprensión de los barrios, tradiciones, usos y costumbres de Querétaro. A través de su pluma, ha cronicado con detalle y sensibilidad la riqueza cultural y el pulso histórico de la ciudad que considera su hogar.

‘El privilegio de vernos a los ojos, de tener un contacto con un ser humano, o el tener el privilegio de leer algo que dejó escrito otra persona, es algo maravilloso. Qué te muestre un paisaje, que te cuente una anécdota, es algo especial que tiene la literatura’, comentó. 

Su involucramiento en círculos intelectuales ha enriquecido su perspectiva y le ha permitido no solo compartir su conocimiento, sino también aprender de la diversidad de pensamientos y enfoques. Su presencia en estos espacios ha contribuido al intercambio de ideas y al enriquecimiento del panorama intelectual y cultural de Querétaro.

‘Yo pienso que la literatura es importante porque es dejar un testimonio de cosas que vas superando, incluso visto desde un aspecto clínico. Escribir es terapéutico, es un ejercicio de amor propio que nos deberíamos de dar todo’, concluyó. 

Edgardo Moreno Pérez es un testigo comprometido con la preservación y difusión del patrimonio cultural de Querétaro, un erudito que ha dedicado su vida a comprender, documentar y compartir la esencia de esta ciudad a través de sus diversas facetas como investigador, docente y escritor. Su legado trasciende las páginas de sus libros, dejando una huella indeleble en la comprensión y apreciación de la historia y la cultura local.

Con información de Francisco Pérez