Se inauguró la exposición , de Judith Romero, un proyecto que expone las vidas y las voces de las mujeres que decidieron no tener hijos, las que cuestionaron lo que el entorno esperaba de ellas en el Museo de Sitio del Centro de las Artes de Querétaro.
Se trata de un proyecto fotográfico comenzado por la autora hace una década y es una conversación prolongada en el tiempo, una morada donde la toma de la palabra se realiza en un entorno seguro y compartido.
Las fotografías que conforman la exposición son retratos de las protagonistas, los espacios que habitan y sus objetos personales que desvelan sus decisiones, pasiones, memorias, anhelos y formas específicas de entender el mundo, y se acompañan de los testimonios escritos y videograbados de sus protagonistas.
Todos los registros, en sus diferentes formatos, reflejan puntos de encuentro:
La infancia
La soledad
La religión
La norma social
Los cuidados
El derecho al control sobre el propio cuerpo
Las relaciones familiares
La independencia o el raro e inusitado sentido de respeto al derecho a no nacer
No obstante, aparecen también historias de vida y experiencias muy distantes como el goce de la sexualidad, los proyectos de familias alternativas, la violencia sexual, el aborto, la discriminación y la producción de identidades que escapan del mandato social.
En la muestra, que ahora llega a Querétaro bajo la curaduría de Rían Lozano, Judith Romero saca del terreno de lo privado la elección de no tener hijos: un asunto que no solo está atravesado por las condiciones materiales y socioculturales, sino en el que, además, muchas mujeres han puesto sus deseos, su gozo y el ejercicio de su libertad en primer término.