Querétaro vivió una de las presentaciones más destacadas de la temporada navideña con la producción de “El Cascanueces”, interpretada por la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro bajo la dirección del maestro Mark Kadin.
Con una orquesta completa integrada por 73 músicos, la interpretación realzó la partitura de Piotr Ilich Tchaikovsky con precisión, energía y un matiz profundamente emotivo.
La producción reunió a más de 100 artistas en escena, combinando música en vivo y danza clásica. El ballet estuvo a cargo del Ballet Clásico de Querétaro Fernando Jhones de la Facultad de Artes de la UAQ, dirigido por Dunet Pi Hernández, formando un equipo artístico que destacó por su disciplina, coordinación y talento local.
Desde su estreno en 1892, “El Cascanueces” se ha consolidado como un símbolo navideño alrededor del mundo. En esta edición queretana, la dirección de Kadin permitió que piezas como la Danza del Hada de Azúcar y el Vals de las Flores adquirieran un carácter interpretativo equilibrado entre sensibilidad y fuerza.
El Cascanueces, tradición en Querétaro
Esta puesta en escena reafirma una tradición que ha tomado identidad propia en la ciudad: una producción realizada con talento queretano y pensada para el público queretano.
La participación de la Filarmónica, bajo el liderazgo de Mark Kadin, refuerza el valor cultural de este montaje que continúa reuniendo a familias e inspirando a nuevas generaciones.
Con esta presentación, “El Cascanueces” confirma nuevamente su vigencia y su capacidad para conectar al público con la magia, la música y el espíritu de la temporada.