Si quieres un toque de aventura en tu luna de miel, no te puedes perder un vuelo en globo aerostático, después, un chapuzón en alguno de sus balnearios o explorar el campo de lavanda, uno de los pocos campos de lavanda en México, donde podrás disfrutar de un tour guiado sobre el proceso de cultivo de distintas variedades y probar aceites esenciales, jabones y tés.