Antes de la corrida, los asistentes comenzaron la noche en el pabellón gastronómico, donde los puestos de antojitos y comida mexicana ya los esperaban para celebrar también el 37 aniversario de la Plaza de Toros de Juriquilla, que, cada año, ha visto, en su escenario, grandes faenas y la consagración de distintas figuras taurinas.