El Centro de Danza y Arte ProArt llevó a cabo sus esperadas clases de puertas abiertas, donde padres, amigos y familiares pudieron vivir de cerca el proceso de aprendizaje que disfrutan las alumnas día a día.
Este evento permitió a los asistentes conocer de primera mano la dedicación de los maestros y la pasión de los estudiantes por el arte.
Una tarde llena de emoción y talento
Desde las 4:30 de la tarde, comenzaron a llegar alumnas de todas las edades, listas y emocionadas por mostrar a sus seres queridos lo que aprenden en cada sesión junto a sus maestros.
Bailarinas de disciplinas diversas, desde la danza clásica hasta el flamenco, realizaron clases llenas de energía y sentimiento, demostrando el fruto de su esfuerzo constante.
«Queremos que los papás conozcan a los maestros y vean cómo trabajamos en el centro», explicó Vanessa Ramos López, bailarina, maestra de danza clásica y coordinadora académica artística de ProArt.
Con la incorporación de nuevos maestros este año, las clases abiertas ofrecieron una experiencia enriquecedora tanto para las familias como para los interesados en el arte.
Danza que se vive cada día con profesionalismo y pasión
Aunque las clases se imparten durante todo el año, este evento anual es una oportunidad para compartir con la comunidad el progreso de las alumnas y la metodología del centro.
«Queremos que vean arte, esa es la misión principal», comentó Ramos López.
En cada movimiento y corrección se refleja la intención de ProArt de llevar la formación artística a un nivel profesional, cuidando cada detalle del proceso.
Un evento que se disfruta en familia
Si bien la mayoría de los asistentes fueron familiares y amigos, ProArt abre sus puertas para que cualquier persona interesada en la danza pueda disfrutar del evento. «Queremos apoyar al arte al máximo», recalcó Ramos, subrayando el propósito del centro de generar un espacio cercano y accesible para todos.
Una experiencia que no puedes perderte
Las clases abiertas de ProArt se celebran una vez al año, como un escaparate de todo lo que se vive y enseña dentro del centro. «Es en estas fechas cuando aprovechamos para mostrar el trabajo de maestros y alumnos», agregó Vanessa
Si no pudiste asistir esta vez, no te preocupes: el 2025 traerá una nueva oportunidad para disfrutar de esta experiencia única, ya que el arte no solo se enseña: se vive, se comparte y se siente en cada paso.